Orizaba.- Católicos marcharon ayer, además de a favor de la vida, para pedir cesen la inseguridad que se vive en el país debido al narcotráfico, los abortos, tanto clandestinos como los legales, que se realizan en algunas partes del país y que los permite la legislación.
Al respecto, el padre Helkin Enríquez Báez expresó: “Creemos que existe una deuda pendiente por parte de la Legislatura, porque todavía no se ha actualizado la legislación para que exista congruencia con la reforma en materia de derechos humanos que se hizo a nivel constitucional y federal”.
Aseguró que debe de expresarse en la Constitución del Estado también esta reforma de derechos humanos en donde uno de los valores es la garantía de la vida.
En cuanto al problema social, el entrevistado dijo que dentro de la Iglesia Católica existen grupos que se dedican al cuidado de la vida y que cada uno de ellos puede salvar hasta 100 mujeres de cometer un aborto.
No obstante, manifestó que muchos más se realizan de manera clandestina, por lo que no se lleva un control de cuántas personas realizan este tipo de muertes.
“Creemos que los grupos a favor del aborto exageran las cifras, porque no existe un control, se utilizan estimaciones”, mencionó.
Omar Celiseo V.
El Buen Tono
