AGENCIA
CDMX.- Con 73 votos a favor y 34 en contra, el Senado de la República, con mayoría de legisladores de Morena y sus aliados, aprobó la reforma que transfiere las funciones del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) al Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi).
La reforma, que ya fue turnada al Ejecutivo federal para su publicación en el Diario Oficial de la Federación, establece la reorganización institucional en materia de evaluación de la pobreza y política social, con el argumento de mejorar la eficacia en los procesos de medición y seguimiento.
Como parte del paquete legislativo, también se derogaron los artículos 75 y 76 de la Ley General de Desarrollo Social, que exigían que los resultados de evaluación reflejaran el cumplimiento de metas y objetivos de los programas sociales.
Críticas desde la oposición
Legisladores de oposición expresaron su rechazo tajante a la desaparición del Coneval, al considerar que se trata de una medida que atenta contra la imparcialidad y autonomía en la evaluación de los programas sociales del gobierno federal.
El senador del PAN, Mario Vázquez, advirtió que “el gobierno está eliminando a un órgano incómodo”, al trasladar sus facultades al Inegi. “Se consolida un sistema donde el mismo gobierno diseña, ejecuta y ahora también evalúa sus programas sociales. Se pierde toda garantía de objetividad y rigor técnico”, afirmó en tribuna.
Por su parte, la senadora del PRI, Edna Geraldina García, cuestionó que el Inegi asuma tareas que no le corresponden por naturaleza jurídica. “No puede ser juez y parte. El Inegi genera datos, pero la evaluación debe estar en manos de otra instancia independiente”, expresó. Acusó además que “en nombre de una austeridad perversa, el gobierno debilita instituciones que evidencian su fracaso”.
Lo que sigue
Con la aprobación de esta reforma, el gobierno federal concentrará bajo una sola institución -el Inegi- tanto la producción de estadísticas como la evaluación de políticas sociales, lo que ha encendido alertas entre especialistas y organizaciones civiles, que temen una pérdida de independencia y transparencia en el monitoreo de la pobreza y el gasto social.
La reforma entrará en vigor una vez que sea publicada en el DOF.
Su exitosa política para acabar con la pobreza:
1. Eliminar a los organismos que monitoreaban los indicadores de pobreza.
2. Decir que hay menos pobres y sí no lo queremos creer, tampoco podemos demostrar lo contrario.
El actual Inegi anda ya vuelto loco desarrollando sus actividades cotidianas ¡y ahora hará también el “jale” de Coneval! Y sin reflejarse en una mejora económica salarial.
Esto es grave, porque en México ya no tendremos acceso a datos confiables sobre desarrollo social, sólo los que quiera y le convengan al régimen autoritario. Que ya no se haga un escándalo por este tipo de cosas es desalentador. ¡México se hunde aún más!
