in

Sheinbaum niega que México adquiera equipos de espionaje israelíes

PUBLICIDAD publicidad

Ciudad de México. — La presidenta Claudia Sheinbaum se desmarcó categóricamente de las prácticas de espionaje de anteriores administraciones al rechazar la adquisición de equipo de vigilancia de origen israelí, específicamente el polémico software Pegasus, que fue utilizado para espiar a periodistas, activistas y opositores políticos en gobiernos pasados.

Durante su conferencia matutina, la mandataria explicó que el actual Gobierno no ha realizado compras de tecnología israelí:

“No se está comprando nada en este momento al Estado de Israel o alguna de las empresas… lo que hay son refacciones de equipos ya adquiridos en su momento”, afirmó.

Este pronunciamiento ocurre en un contexto sensible, mientras el expresidente estadounidense Donald Trump llamó recientemente al cese del fuego entre Israel e Irán. Sheinbaum, al ser consultada al respecto, reiteró la postura neutral de México:

“Nosotros siempre vamos a ser factor de paz”.

El oscuro historial de Pegasus

El programa Pegasus, desarrollado por la empresa israelí NSO Group, salió a la luz en 2021 por haber sido utilizado en operaciones de espionaje masivo a nivel global. Esta herramienta tiene la capacidad no solo de extraer información de teléfonos móviles, sino también de activar cámaras y micrófonos sin que el usuario lo sepa.

Investigaciones periodísticas revelaron que los objetivos del software incluían más de 180 periodistas, 600 políticos, 85 activistas de derechos humanos y 65 empresarios alrededor del mundo. Aunque NSO niega estas acusaciones y afirma que su tecnología está diseñada para prevenir delitos y atentados, la falta de transparencia y control sobre sus clientes ha generado una ola de críticas.

“Israel es una incubadora de tecnologías represivas”, advirtió el abogado especialista en derecho digital, Jonathan Klinger.

Una postura clara ante la vigilancia

Con este posicionamiento, el Gobierno de Sheinbaum marca distancia respecto al uso de tecnologías intrusivas. La administración actual busca evitar repetir los errores del pasado, cuando el espionaje a ciudadanos se convirtió en una práctica común disfrazada de “seguridad nacional”.

La presidenta deja claro que México no será parte del negocio de la vigilancia opaca, apostando por una política que privilegie la paz, la transparencia y el respeto a los derechos humanos.

CANAL OFICIAL

Confirman presencia del gusano barrenador en Minatitlán; ganaderos en alerta

Impunidad verde: De 129 denuncias por tala clandestina en Veracruz, sólo una terminó en sanción