


Agencias
Ciudad de México. – Tras las recientes declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, en las que afirmó que México y Canadá hacen lo que Estados Unidos les ordena, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, respondió con firmeza: “Aquí no se obedece a ningún país; el pueblo manda”.
Las palabras de Trump, pronunciadas durante un acto político en Estados Unidos, generaron polémica al sugerir que los países vecinos del norte siguen instrucciones de Washington en temas económicos y de seguridad.
En respuesta, Sheinbaum enfatizó que México mantiene su soberanía y que las decisiones del país se toman en beneficio de la ciudadanía:
“México es un país libre e independiente. Las políticas y acciones que emprendemos se realizan pensando en el bienestar de nuestro pueblo, no siguiendo órdenes de otros gobiernos”, declaró en conferencia de prensa.
Analistas políticos señalaron que esta postura reafirma la intención del gobierno mexicano de mantener una política exterior soberana, especialmente en materia comercial y de seguridad fronteriza, áreas donde históricamente ha habido presión de Estados Unidos.
La declaración de Sheinbaum también busca enviar un mensaje de unidad interna, mostrando que las decisiones del país están alineadas con los intereses de la ciudadanía y no con presiones externas.


