Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- En un acto de opacidad que contradice los objetivos del Programa Municipal de Desarrollo Urbano (PMDU), la sesión de cabildo para autorizar siete cambios de uso de suelo fue suspendida, luego de que ediles denunciaran violaciones legales y falta de estudios técnicos.
Los expedientes no fueron turnados a comisiones y las “opiniones favorables” de Obras Públicas carecían de sustento ambiental y de factibilidad de servicios. La Dirección de Abner Ceballos Lozano ignoró que Córdoba requiere 21 mil viviendas nuevas rumbo a 2040, pero priorizando la consolidación urbana y no la expansión desordenada.
El PMDU señala que existen 237 hectáreas intraurbanas aprovechables y más de 6 mil viviendas deshabitadas, lo que reduciría a la mitad la necesidad de nuevo suelo. Pero las solicitudes detenidas contemplaban usos comerciales y mayor densidad en colonias como Huilango 3000, Vista Hermosa y Rancho Santa Clara, justo lo que el Programa intenta evitar.
Mientras se advierte el riesgo ecológico en zonas como los ríos Seco y San Antonio y un rezago de más de 8 mil viviendas, Obras Públicas impulsa intereses privados sobre la planeación urbana. La suspensión de la sesión no es más que un paréntesis en una crisis de gobernanza que evidencia que, a pesar de presumir un “renacimiento”, las autoridades están perdidas en el reordenamiento que prometieron, perpetuando un ciclo de corrupción y crecimiento caótico.
