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Tailandia despide a su reina madre Sirikit, símbolo eterno de la nación

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De la redacción
El Buen Tono

Tailandia llora la partida de su reina madre Sirikit, figura emblemática y venerada del país, quien falleció a los 93 años debido a una infección sanguínea que agravó su delicado estado de salud. Viuda del recordado rey Bhumibol Adulyadej, Sirikit deja un legado de dedicación al pueblo tailandés, elegancia y fortaleza que la convirtió en un símbolo nacional.

El cuerpo de la monarca fue trasladado desde el Hospital Conmemorativo Rey Chulalongkorn al Gran Palacio de Bangkok, donde permanecerá en el Salón del Trono Dusit Maha Prasat durante meses, mientras el país rinde homenaje. La solemne procesión, seguida por millones de tailandeses a través de Thairath News, recorrió los 10 kilómetros entre el hospital y el palacio, acompañada de flores blancas, cantos budistas y un profundo silencio reverente.

La ceremonia de colocación del cuerpo en la capilla ardiente inició un calendario de ritos que contará con la presencia del rey Maha Vajiralongkorn, hijos, nietos y altos dignatarios. Miles de ciudadanos vestidos de negro se congregaron frente al Palacio Real, llevando flores, retratos y cintas en honor a la reina. En todo el país, las banderas ondean a media asta, los funcionarios vestirán luto por un año y la ciudadanía durante 90 días, mientras se suspenden celebraciones públicas y los medios adoptan una programación sobria.

El funeral de Sirikit culminará con su cremación real, siguiendo un protocolo ancestral. En el Salón del Trono, la urna con sus restos fue colocada bajo la “nine-tiered white umbrella”, el emblema más sagrado de la monarquía tailandesa, reservado únicamente para los reyes y símbolo de la conexión espiritual entre el monarca y su pueblo.

Durante su reinado, Sirikit fue reina consorte durante el periodo más largo en la historia de Tailandia, compartiendo 66 años de matrimonio con el rey Bhumibol. Su estilo refinado y su compromiso humanitario la convirtieron en un ícono internacional y en una figura cercana al pueblo. Nacida el 12 de agosto de 1932, también promovió las artes tradicionales y defendió el papel de la mujer en la sociedad, al punto que su cumpleaños se declaró Día de la Madre en Tailandia.

Hoy, retratos dorados de la reina Sirikit adornan templos, escuelas y oficinas, y las pantallas de Bangkok proyectan imágenes de la soberana. Incluso artistas internacionales, como Blackpink, pidieron a su público vestir de negro en señal de respeto. Tailandia atraviesa un momento de profunda reflexión y unidad, recordando a una mujer que fue más que una reina: una madre, líder y símbolo eterno de la identidad nacional.

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