De la Redacción
el buen tono
Orizaba.- La Policía Municipal de Orizaba permite la venta de pirotecnia debido a que el escolta del inspector de la corporación, Plácido Andrés Rodríguez Domínguez, puso a vender cohetes a su esposa.
La señora se escuda en que su pareja es policía municipal y ofende a los otros comerciantes y hasta a las personas que compran esos juegos pirotécnicos.
La señora, presuntamente respaldada por la posición de su marido en la fuerza policial, ha desatado la controversia al ofender a otros comerciantes. Entre los comentarios de los inconformes se destaca el temor de expresar más detalles, pero han realizado un llamado urgente a las autoridades estatales, lideradas por Cuitláhuac García Jiménez, para intervenir y poner fin a este tipo de comportamientos.
“La señora se siente con el derecho de hacer lo que quiera. Tenemos miedo de revelar más detalles, pero hacemos un llamado atento a las autoridades estatales para que tomen cartas en el asunto y eviten que continúen este tipo de comportamientos”, expresaron los inconformes.
Durante el fin de semana, otro incidente se sumó al escándalo cuando señalaron al encargado del Mercado de Artesanías, José de Jesús Castro Blas.
Según una denuncia ciudadana, Castro Blas al parecer amenazó a los encargados de una dulcería, indicándoles que si permitían que una comerciante vendiera sus cajas de regalos, multarían y clausurarían el negocio, alegando que la mercancía se exhibía en una de las ventanas, lo que no estaba permitido porque no contaban con el permiso correspondiente.
En un video publicado, se reveló que este funcionario, quien anteriormente trabajaba en la Policía Municipal, utilizaba las tarjetas de gasolina de las patrullas para llenar sus vehículos y cobraba supuestamente golpes a los elementos de las unidades que chocaban. Se afirmó que este individuo, trasladado recientemente al área de Comercio, cobró por reparaciones inexistentes y fue obligado a devolver dinero después de que lo descubrieran.
