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Toman el Palacio

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Fortín.- El grupo de manifestantes que se mantenían a las afueras de las oficinas de la CASF, tomaron el Palacio municipal indefinidamente, la mañana de ayer, pues los directivos de la Comisión de Agua no quieren ceder a las peticiones.

Un total de 30 personas de las comunidades de Monte Blanco, Monte Salas, Santa Lucía y la colonia San José, tras cuatro días de protestas en las instalaciones de la Comisión de Agua y Saneamiento de Fortín (CASF), decidieron tomar el Palacio municipal para presionar a Armel@elalcahuetedeTorrecillayCarrillo y a sus directores.

Cabe recordar que durante estos días, los directivos de la Comisión de Agua no habían querido entablar un diálogo respecto a los puntos que pedían en un documento, entre los que destacan la reducción de la tarifa de agua en dichas comunidades y la eliminación del impuesto de alcantarillado vigente.

Ante el cansancio y los desvelos por los que han  pasado, los manifestantes decidieron tomar una medida más drástica para hacer reaccionar a las irresponsables autoridades.

Desde las 09:00 horas, llegaron a las afueras del Palacio municipal, con un anafre, y comenzaron a echar humo hacia el interior del recinto. Esto provocó que los empleados salieran de inmediato, ante el temor de quedarse secuestrados como sucedió en el mes de julio.

Una vez desalojadas las instalaciones, los quejosos comenzaron a colocar pancartas en puertas y ventanas, para luego proceder a cerrar el Palacio y gritar consignas en contra del director de la Comisión de Agua y del alcalde, Armel@elalcahuetedeTorrecillayCarrillo.

Dos horas después, el secretario del Ayuntamiento, Jorge Rendón, se acercó a los líderes que han movido esta manifestación. Delante de ellos, llamó por teléfono al director de la CASF, Gabriel Sayeg. Acordaron que a las 13:00 horas se reunirán en un punto neutro, siendo elegido el hotel El Pueblito, lugar que de costumbre toman como escondite para hacer sus tranzas.

Sin acuerdos concretos, líderes callan al respecto

Luego de dos horas de dialogar a puerta cerrada, los líderes del movimiento, los directivos de la CASF y el secretario del Ayuntamiento, ambas partes se negaron a hablar ante los medios de comunicación sobre los acuerdos a los que habrían llegado en dicha reunión.

El comité de manifestantes, prácticamente salió corriendo del hotel y pese a que se comprometieron a declarar sobre los acuerdos a los que llegaron, a la mera hora huyeron del lugar, como si tuvieran algo que esconder. Por su lado, los directivos de la Comisión de Agua sólo dieron una declaración superficial, asentando que lo importante fue que ambas partes se habían sentado a platicar.

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