CD. Mendoza.- El incumplimiento del alcalde Reené Huerta Rodríguez y del delegado de la SEV en Orizaba, Luis Antonio Garrido Castillejos, de gestionar y llevar dos aulas móviles a la primaria Enrique C. Rébsamen de la localidad La Cuesta, provocó molestia y por ello padres de familia tomaron el plantel y amagaron con no liberarlo hasta que cumplan con el compromiso.
El hartazgo de los padres se desató porque unos 40 estudiantes de cuarto y quinto grado llevan casi dos meses tomando clases en el patio de la escuela bajo carpas que les otorgó de forma provisional el Ayuntamiento, esto tras desocupar dos salones que resultaron afectados por los sismos del 7 y 19 de septiembre.
Madres de familia que se apostaron ayer en el portón de la escuela evidenciaron la indiferencia y la falta de compromiso de las autoridades municipales y educativas, tras la reunión que sostuvieron con padres y docentes el pasado 19 de octubre en el Ayuntamiento, en la que aseguraron que en un lapso de 15 días posteriores llegarían las aulas móviles para mejorar las condiciones de estudio de los menores de edad.
Precisaron que a causa de que los estudiantes toman clases a la intemperie, con el descenso de la temperatura propio de las mañanas, algunos ya se enfermaron de las vías respiratorias y a causa de ello faltan a clases, y que por esta razón no están dispuestas a exponer su salud, incluso mencionaron que hay por lo menos un estudiante que padece asma.
“El 19 vino el Delegado de la SEV al Palacio Municipal y junto con el Presidente nos prometieron aulas móviles en 15 días y hasta ahorita no han llegado, desde hace dos meses les pusieron unas carpas en el patio, pero hace mucho frío y nuestros hijos se están enfermando, no vamos a soltar la escuela hasta que nos traigan las aulas, esperamos y esperamos y ya nos cansamos”, expresó una madre.
Al respecto, el supervisor escolar de la Zona 023, Edgardo Martínez, precisó que la inquietud de los padres es dialogar con las autoridades.
