Orizaba.- En el marco del Día Internacional de la Trabajadora del Hogar se conoció que existe un vacío en la ley que pudiera protegerlas como a todo trabajador, máxime que la condicionante para ser contratada y realizar labores del hogar es tener disponibilidad durante todos los días del año; no hay contrato por escrito, los acuerdos son de buena fe y el pago de un salario está sujeto a la buena voluntad de los patrones.
Mediante un sondeo realizado con algunas personas que prestan sus servicios en la ciudad, la mayoría respondió que su salario es puntual, decoroso y que a veces hasta oportunidad tienen de viajar; lo que no tienen es un contrato que les ampare para descansar en días festivos por ejemplo y tampoco tienen horario fijo, ni reciben pago por horas extras. Hay otros casos de mujeres jóvenes que prestan sus servicios como trabajadoras domésticas y al tener que viajar de la sierra a la ciudad, les implicaría gastar mínimo 100 pesos de transporte diario y sus ingresos son de apenas 50 pesos.
Matilde De los Santos Parada
El Buen Tono