AGENCIA
Libia.- Tres niñas hermanas de origen sudanés, de 9, 11 y 17 años, murieron cuando la lancha inflable en la que viajaban hacia Italia se hundió en aguas internacionales del mar Mediterráneo. La embarcación, que había zarpado desde Zuwara, Libia, estaba sobrecargada y desinflada, y enfrentó mal clima con olas de hasta 1.5 metros.
Voluntarios de la organización alemana RESQSHIP rescataron a 65 migrantes y recuperaron los cuerpos de las menores en la madrugada del sábado. Una cuarta persona sigue desaparecida. La madre y el hermano de las víctimas sobrevivieron y fueron trasladados, junto con los demás rescatados, a la isla italiana de Lampedusa. Testigos relataron escenas desgarradoras: la madre permaneció en estado de shock junto a los cuerpos de sus hijas, que fueron envueltos en sábanas blancas.
El naufragio refleja la tragedia constante de la ruta migratoria del Mediterráneo central, considerada una de las más mortales del mundo. Desde 2014, más de 30 mil personas han perdido la vida en este cruce, según datos de la Organización Internacional para las Migraciones.
En paralelo, la ONG SOS Humanity denunció que guardacostas libios siguen interceptando embarcaciones y forzando a migrantes a regresar a Libia, donde enfrentan tortura y abusos, lo que constituye una violación del derecho internacional.
