


Agencias
Álamo, Ver. – En medio de un ambiente de profundo dolor, el cuerpo de la maestra jubilada Irma llegó este miércoles por la noche al ejido Pueblo Nuevo, donde será velada por sus familiares y seres queridos.
Irma, quien además de haber dedicado su vida a la educación trabajaba como taxista, fue privada de la libertad desde el pasado 18 de julio. Su desaparición conmocionó a la comunidad y, tras días de angustia, su hallazgo sin vida ha dejado un sentimiento de tristeza e indignación entre vecinos y compañeros.
La llegada de sus restos se dio en medio de una noche tensa, marcada por el llanto, el duelo y la exigencia de justicia por parte de familiares, amigos y ciudadanos que se han unido al reclamo para que este crimen no quede impune.
La comunidad exige a las autoridades una investigación exhaustiva y castigo a los responsables. La violencia no puede seguir arrebatando vidas sin consecuencias.


