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Una teoría filosófica de la realidad, la astrología antigua y la conciencia humana (Parte 1)

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CARLOS GURAIEB ABELLA

A veces tenemos creencias falsas o, al menos, creencias que deben ser cuestionadas.

¿Si los sistemas de creencias de los pueblos antiguos eran realmente primitivos? Cuando recordamos la historia del pueblo de la antigua Grecia, aunque sin duda se les considera avanzados en los ámbitos de la política y la filosofía, muchas de sus ideas espirituales pueden considerarse creencias primitivas e imaginadas.

La historia de la mitología griega antigua para los antiguos griegos era tan importante para los griegos como lo es la ciencia para nosotros hoy. Según los estándares actuales, descartamos estas historias como creencias primitivas e imaginarias. Hoy nos consideramos mucho más avanzados, con más conocimientos y superiores en todos los sentidos. ¿Pero lo somos?

¿Qué pasaría si, desde un sentido espiritual y metafísico, el griego antiguo promedio fuera más avanzado que nadie hoy? La arqueología contemporánea muestra que prácticamente todas las culturas antiguas tenían templos alineados con las estrellas y los planetas. Estas culturas no escatimaron en gastos y se destinaron enormes recursos a la construcción de estos templos y estructuras. ¿Por qué? Quizás porque hay algo importante que saber a partir de las observaciones de los planetas.

Científicamente hablando, sabemos que los planetas orbitan alrededor del sol a velocidades tremendas. Desde el punto de vista gravitacional, es como si los planetas estuvieran en continuo estado de caída. Este tipo de movimiento genera electricidad en la Tierra. Por ejemplo, el gran científico y arquitecto Nikola Tesla pudo fabricar una máquina en las Cataratas del Niágara que aprovechaba la energía cinética generada por el agua que corría para generar electricidad. Por lo tanto, es perfectamente lógico suponer que nos rodean energías invisibles.

Cuando se entiende esto, se demuestra que podría haber algo importante en la astrología que la ciencia convencional descarta como mera superstición. Cuando hablamos de Astrología, la mayoría de la gente piensa en el pequeño fragmento del periódico, revista o correo electrónico personalizado. Sin embargo, la verdadera “Astrología Védica” antigua tiene más de 5000 años y es empírica y compleja. La Astrología Védica es la práctica más cercana que tienen los humanos para interpretar estas energías planetarias.

Por ejemplo, la mayoría de las personas se guían por su signo de nacimiento y viven toda su vida sin ampliarlo nunca. Según la astrología védica y occidental, los individuos nacen bajo alineaciones y configuraciones planetarias, que impactan directamente en quiénes se convierten en la Tierra. Cada ser humano tiene un signo ascendente, un signo solar y un signo lunar. Ciertas configuraciones planetarias sólo se alinean cada 30, 40 y 50 años. Estas alineaciones dan forma a los individuos que existen en nuestra realidad. Quizás se construyeron antiguos templos astrológicamente significativos bajo las estrellas en puntos estratégicos únicos para que los humanos pudieran ir a estos templos y dar a luz bajo la supervisión de un “vidente” que pudiera usar inmediatamente las estrellas y los planetas para identificar los rasgos y el propósito del recién nacido.

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Una teoría filosófica de la realidad, la astrología antigua y la conciencia humana (Parte 2)