


*Imponen a la excandidata como coordinadora municipal y al panista corrupto Marcos Galicia sin renunciar a su partido
Juan López
EL BUEN TONO
Córdoba, Ver.- El Partido del Trabajo (PT) en Córdoba fue entregado sin pudor a Leticia López Landero, quien impuso a Paola Castellanos y a Marcos Galicia en la dirigencia municipal, ambos ampliamente repudiados por su historial de corrupción, abuso de poder y desprecio por las causas sociales.
Sin renunciar al Partido Acción Nacional (PAN), Galicia fue integrado al Comité Municipal del PT como parte de una maniobra burda orquestada por López Landero, quien intenta reciclar su fallida carrera política. La militancia fundadora del partido calificó el movimiento como una traición, señalando que Galicia continúa operando dentro del PAN mientras se ostenta como supuesto “operador político” del PT.
Marcos Galicia ya fue señalado en su momento por tráfico de influencias, corrupción, y por haber obtenido de forma turbia una concesión dentro del Parque V Centenario durante el gobierno panista de Leticia López. Ahora, reaparece como emisario del oportunismo, sin ideología ni convicción.
A la par, la exalcaldesa impuso como coordinadora municipal a Paola Castellanos, conocida entre los cordobeses como quien no hizo nada en la Coordinación de Bienestar Animal, ya que ignoró múltiples denuncias de maltrato animal. Su gestión se caracterizó por el autoritarismo y la insensibilidad, tanto en el tema animalista como en su papel como inspectora de Comercio.


