

Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba, Ver.- Embotelladoras y purificadoras de Córdoba solo requieren un “aviso de funcionamiento”, no una licencia sanitaria, para comercializar agua purificada, señala COFEPRIS y la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios de Veracruz, por lo que se estaría comprometiendo la salud de la población en el consumo de agua.

En Córdoba decenas de plantas embotelladoras de agua operan bajo un esquema regulatorio sin tanta restricción que pone en riesgo la salud pública.
La permisividad institucional es alarmante. Respuestas a solicitudes de transparencia confirman que ninguna embotelladora en Córdoba posee licencia sanitaria, y desde 2021 no se registran clausuras o sanciones a pesar de que la Ley General de Salud faculta a las autoridades para imponer medidas ante riesgos sanitarios.

Peor aún: la normativa NOM-201-SSA1-2015, que exige condiciones higiénicas en el procesamiento de agua, se reduce a una recomendación para los consumidores, quienes solo pueden identificar establecimientos formales si exhiben el “aviso” —documento que no garantiza cumplimiento real de estándares.
