

Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- Embotelladoras y purificadoras de Córdoba sólo requieren un “aviso de funcionamiento”, no una licencia sanitaria, para comercializar agua purificada, señala Cofepris y la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios de Veracruz, por lo que se estaría comprometiendo la salud de la población en el consumo de agua.
En Córdoba decenas de plantas embotelladoras de agua operan bajo un esquema regulatorio sin tanta restricción que pone en riesgo la salud pública. La permisividad institucional es alarmante.
Respuestas a solicitudes de transparencia confirman que ninguna embotelladora en Córdoba posee licencia sanitaria, y desde 2021 no se registran clausuras o sanciones a pesar de que la Ley General de Salud faculta a las autoridades para imponer medidas ante riesgos sanitarios.
Esta negligencia regulatoria contrasta con crisis sanitarias locales: en 2025, en IMSS Córdoba se atendieron 146 casos de dengue, donde la deshidratación exige acceso a agua segura. Si los productos comercializados están contaminados, podrían desencadenar brotes de hepatitis, cólera o enfermedades gastrointestinales, especialmente en comunidades que dependen de estas opciones económicas.
