José Juan
El Buen Tono
Ixhuatlán.- A 25 días de que concluya la administración de Dora Galicia, se multiplican las quejas por despidos, retrasos en el pago de aguinaldos y desorden administrativo, panorama que exhibe el desgaste y la falta de control con la que cierra su periodo de gobierno.
En distintos departamentos se reporta incertidumbre entre los trabajadores, quienes aseguran que no existe comunicación clara sobre la continuidad de sus contratos ni sobre el calendario de pagos pendientes.
Algunos empleados manifestaron que, además de las salidas inesperadas de personal, los recursos humanos y financieros se manejan sin coordinación, lo que derivó en retrasos en trámites internos y afectaciones a los servicios que dependen de estas áreas.
A lo anterior se suma el malestar ciudadano por oficinas municipales cerradas o con atención limitada, situación que complicó la realización de gestiones básicas en un momento en que la administración debería garantizar orden y estabilidad para el proceso de entrega-recepción.
Mientras tanto, la expectativa por la llegada del próximo gobierno aumenta, pues habitantes y trabajadores coinciden en que será necesario un diagnóstico profundo para corregir los rezagos y restablecer la operación normal del ayuntamiento.
En medio de esta situación, uno de los casos más mencionados es el de José Lázaro Rodrigo Fernández Hernández, asesor externo de Comunicación Social que rara vez se presenta en el municipio.
Trabajadores municipales señalan que están siendo retirados de sus funciones sin recibir sus prestaciones, mientras el asesor externo continúa protegido pese a su nula presencia y a que opera más en Fortín y Córdoba que en Ixhuatlán.
Lo consideran un “aviador” de la edil.
