in

Cañeros, frente a posible crisis

PUBLICIDAD publicidad

De la zona.- Como se sabe, hoy día, debido a una sobre oferta de caña y de azúcar a nivel mundial, de la que no escapa el mercado nacional, el sector azucarero mexicano vive una profunda crisis, causada esta vez por la sustancial depresión de los precios de la caña y del azúcar, que se ha experimentado en forma prácticamente ininterrumpida desde septiembre de 2011 hasta la fecha, y debido a lo cual los precios de venta del azúcar estándar en las Centrales de Abasto de las principales ciudades del país han descendido en casi 50% en ese plazo, con la consecuente descapitalización de productores agrícolas e industriales.

Con los promedios actuales de precios de azúcar estándar, los ingenios incurren ya en costos de producción que superan al precio de mercado, generando resultados negativos y déficit de flujos de caja que les impiden satisfacer sus más esenciales necesidades de capital de trabajo. 

Si esa situación persiste, sería más conveniente la suspensión de operaciones, para detener las pérdidas operativas que hoy día se generan en las factorías del país, pues no hay fuentes de recursos que posibiliten el financiamiento de un monto tan cuantioso como el que se generaría por la pérdida que se causaría hasta el final del presente año.

El resultado sería la quiebra integral del sector, con consecuencias funestas que se extenderían a centenares de municipios a lo largo del país, afectando varios cientos de miles de cañeros, en un fenómeno espiral que rápidamente contaminará a otras ramas de actividad económica, como el sistema financiero, los proveedores de productos agroquímicos y de combustóleo, los transportistas, etc.

Los factores de la producción del sector azucarero mexicano han incurrido en enormes pérdidas, tanto los dueños de las factorías, como los agricultores de caña de azúcar. Desde hace aproximadamente un mes, las agrupaciones nacionales de productores de caña han intervenido activamente en la contención de la actual sobre oferta de azúcar, que alcanza el orden de 700 mil toneladas, clausurando temporalmente los almacenes y bodegas de los ingenios azucareros, para evitar que los excedentes continúen inundando el mercado local. 

Hasta la fecha, los productores agrícolas solamente habían permitido en ciertos casos la salida de los volúmenes de azúcares que los industriales hubiesen pactado en contratos de exportación, con el propósito de que una parte de los excedentes saliera del país, para re equilibrar el mercado doméstico, o habían autorizado en algunos otros casos el desplazamiento de azúcares, cuando fuese posible comprobar que estos habían sido colocados a precios sustancialmente por encima de los vigentes en el mercado.

Fue así que en los primeros días de febrero de 2013, los productores cañeros aprobaron al Señor Juan Cortina, accionista del Grupo Azucarero México, la salida de 2,300.00 toneladas de azúcar producida por dos de los ingenios de ese Grupo Azucarero México (700 toneladas del ingenio El Dorado, y 1,600 toneladas del ingenio Tala), ya que el mencionado Señor Cortina aseguró que ese volumen sería comercializado el 11 de febrero de 2013 al precio de $502.00 pesos por bulto de 50 kilogramos ($10,040.00 pesos por tonelada), precio muy superior del azúcar estándar al vigente en el mercado ese día, del orden de $400.00 pesos por bulto ($8,000.00 pesos por tonelada).

El volumen referido fue efectivamente documentado en tres facturas, numeradas respectivamente GPAM0000014307, por 800 toneladas, expedida a Electropura, GPAM0000014308, también expedida por 800 toneladas a Electropura y GPAM0000014309, por 700 toneladas, expedida a Sabritas, todas ellas al precio de $502.00 pesos por bulto.

Sin embargo, ha sido muy lamentable para los productores cañeros, quienes confiaron en la palabra del Señor Cortina y creyeron en sus facturas, percatarse al verificar ante el sistema de información del Servicio de Administración Tributaria (SAT), que tales facturas, elaboradas y expedidas el 11 de febrero de 2013, fueron canceladas cuatro días después, el 15 de febrero de 2013, debido sin duda alguna a que el precio efectivamente operado habrá sido muy inferior al que el Señor Cortina aseguró a sus cañeros serían vendidas las 2,300 toneladas de azúcar que ellos le permitieron desplazar con ese argumento.

Decepcionante para los productores agrícolas y para el resto de los industriales azucareros ha sido constatar que las facturas exhibidas a las agrupaciones nacionales de cañeros por el Señor Cortina, quien además de ser empresario azucarero es Presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera, solamente se usaron para aparentar falsamente un precio alto de venta del azúcar, en un descarado engaño a sus productores y a sus agremiados.

Es sumamente vergonzoso para el sector azucarero mexicano que haya sido precisamente el Presidente de la Cámara que agrupa a los empresarios industriales azucareros del país, quien haya protagonizado una falsificación y engaño tan reprobable, en detrimento de toda una actividad económica que involucra a decenas de miles de familias de industriales, empleados, trabajadores y agricultores, y a la que se supone debería proteger y no afectar, mediante una farsa que daña a todo el sector y que sólo le beneficia a él y a su grupo empresarial.

Es reprochable que quien debería predicar con el ejemplo sea precisamente quien decepcione a sus agremiados y a sus cañeros al haber incurrido en el engaño, la maquinación y la intriga. Es ignominioso que quien debería hacer intervenir toda su capacidad para poner orden en el mercado azucarero, sea quien contribuya al desequilibrio, la irracionalidad y caos que podrían desencadenar una grave crisis económica de dimensión nacional, cuyas consecuencias sociales apenas son imaginables.

 

 

De la redacciòn

El Buen Tono

CANAL OFICIAL

Congreso habría solventado la deuda de administración 2012

Esperan saldo blanco