


Córdoba.- Sin señalamientos adecuados, tramos con el pavimento en mal estado, sin señaléticas de precaución y desviación, es como se encuentra la autopista Córdoba-Fortín, en donde los automovilistas corren peligro latente.
En distintos puntos de la autopista se observan daños en el pavimento, así como falta de señalamientos de precaución, siendo innumerables las fallas que tiene esa arteria para miles de autos, camiones y autobuses que circulan diariamente por esos lugares.
La zona nombrada El Trébol, entre Amatlán y Córdoba es la clara imagen de la falta de conciencia para brindar a los conductores seguridad, pues las cuchillas de los diferentes carriles no tienen ningún letrero de precaución, por lo que los automovilistas deben manejar con mucha atención.
En el kilometro 298, se encuentra una desviación que no cuenta con señalamientos de precaución ni de disminución de velocidad y es donde se observa la desorganización de los automovilistas para transitar, un descuido y el conducir en velocidad inmoderada podrían ocasionar una tragedia por no tener un indicador.
Basura y restos de caña tiradas por los alrededores del kilómetro 298, son visibles por todos los conductores, además de que tapan las zanjas y cunetas de desagüe.
Otra curva sin señalamiento se encuentra delante del kilómetro 298, en donde camiones y autos conducen a toda velocidad, y en un descuido y mal cálculo para transitar, conllevarían a una desgracia sin dudar.
Otros de los principales problemas en la autopista es la falta de vibradores y reductores de velocidad, para que los camiones y traileres disminuyan la velocidad, pues muchos de los accidentes son resultado del mal manejo y la poca atención en señalamientos de baja velocidad.
En el camino se encontró una barra de metal sin señalamientos, en la que se ignora que tipo de velocidad es recomendada para los automovilistas, así como también los de desviación. En la carretera libre en el tramo de La Tinaja-Veracruz, kilómetro 300 + 1, se puede observar la falta de líneas para el acotamiento, así como cuadros desgastados en donde los autos, autobuses y camiones pesados, pasan por ellos ocasionándoles daños a sus llantas y amortiguadores.

