


Washington.- El pasado jueves 9 de junio, la senadora por Massachusetts, Elizabeth Warren, pronunció un discurso sobre el estado del poder judicial en los Estados Unidos. Comparto la parte referente a nuestro paisano, el juez federal Gonzalo Curiel.
Pero Trump no cree que esas reglas se apliquen a él. Así que en mitin hace dos semanas, y casi todos los días, desde entonces, el candidato republicano a la Presidencia de los Estados Unidos ha atacado salvajemente a Gonzalo Curiel, el juez federal que preside sobre su caso.
Hay que entender que Trump está criticando al Juez por seguir la ley, en lugar de doblarla para ajustarla a los intereses financieros de un acusado rico y ‘frágil’.
Trump también se queja de ser tratado “injustamente” porque “el Juez, creemos, es mexicano”. Cuando alguien le reclamó, Trump redobló sus argumentos diciendo “estoy construyendo un muro, es un conflicto de intereses inherente”. Trump ha pedido a miembros de su campaña que intensifiquen ataques públicos contra el juez Curiel y contra jueces musulmanes usando la teoría repugnante que dice que la intolerancia y el racismo de Trump compromete la neutralidad de los jueces.
Al igual que todos los jueces federales, el juez Curiel está obligado por el código de ética judicial federal a no responder a estos ataques. Trump se mete con alguien que está éticamente obligado a no defenderse, exactamente lo que se espera de un bully racista.
El juez Curiel no puede responder, pero nosotros sí. Gonzalo Curiel nació en Indiana, no en México, de padres inmigrantes que trabajaron duro toda su vida. Asistió a la Universidad de Indiana, donde obtuvo su licenciatura y después a la escuela de leyes.
Durante 13 años, trabajó como fiscal federal en el Sur de California, encabezando la lucha contra los cárteles de la droga mexicanos, como líder de la División de Control de Narcóticos de esa región. Colaboró con altos funcionarios mexicanos para romper la cultura de la corrupción entre el Gobierno mexicano y los más poderosos traficantes de cocaína en América del Norte.
Su esfuerzo fue impresionante. En ambos lados de la frontera, lavadores de dinero, bandas callejeras, y asesinos fueron detenidos y procesados.
Pero el éxito llegó a un gran costo. Testigos fueron asesinados, lo mismo que funcionarios mexicanos. El propio juez Curiel fue el blanco de un complot para asesinarlo. Pasó la mayor parte de un año viviendo oficialmente en la clandestinidad, bajo la protección de Alguaciles de Estados Unidos.
Más tarde, después de sus años de servicio como fiscal, el juez Curiel fue designado a los tribunales del estado de California, por un Gobernador republicano que lo llamó un “héroe americano”. Fue nominado a los tribunales federales por un presidente demócrata, y confirmado por el Senado.
Esa es la clase de hombre que es el juez Curiel. ¿Qué clase de hombre es Donald Trump?
Donald Trump dice que “El juez Curiel debería avergonzarse de sí mismo.”
No, Donald, el que debería estar avergonzado de sí mismo eres tú. Debes avergonzarte por usar el megáfono de una campaña presidencial para atacar el carácter y la integridad de un Juez, simplemente porque crees tener algún derecho dado por Dios para robar el dinero de la gente y salirte con la tuya. Eres una vergüenza para tí mismo y para este gran país.
Donald Trump dice que “alguien debe supervisar al juez Curiel porque lo que está haciendo es una vergüenza total.” No, Donald, lo que tú estás haciendo es una vergüenza total. Atacar a un juez que pasó años defendiendo América del terror de asesinos y traficantes de droga, simplemente porque hace mucho tiempo su familia llegó a Estados Unidos desde otro lugar. Tú, Donald Trump, eres una vergüenza total.
El juez Curiel es uno de los incontables patriotas americanos que ha pasado décadas sirviendo a su país en silencio, a veces con gran riesgo para su propia vida.
Donald Trump es un gran fraude, desagradable, que nunca ha arriesgado nada por nadie y no sirve a nadie, más que a sí mismo.
Y esa es sólo una de las muchas razones por las que nunca se convertirá en Presidente de los Estados Unidos.
A pesar de estos ataques vergonzosos, nadie duda de que el juez Curiel continuará presidiendo el caso de Trump de manera justa y neutral. Debido a que el juez Curiel es un abogado con integridad y eso es lo que los abogados con integridad hacen.
El juez Curiel ha sobrevivido a cosas mucho peores que Donald Trump. Ha sobrevivido a intentos de asesinato reales. No tendrá ningún problema para sobrevivir a las rabietas desagradables de Trump.

