

ANKARA.- Los atentados con coche bomba, contra comisarías de Policía en Turquía, adjudicados al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), dejan hasta el momento seis muertos y al menos 290 heridos, en una escalada de violencia en la región.
Un coche bomba estalló este jueves junto a una comisaría policial en la ciudad de Elazig, cuando los agentes llegaban a sus trabajos, causando tres muertos y 217 heridos, entre ellos 85 policías y 60 civiles, informó el primer ministro turco, Binali Yildirim.
Por lo menos, 72 de los heridos fueron dados de alta, mientras que 14 permanecen en estado crítico, por lo que la cifra de víctimas mortales podría elevarse, advirtió Yildirim, citado por el diario turco Hürriyet.
Yildirim, quien juró que el terror no se adueñará de Turquía, canceló sus actividades en Ankara para trasladarse a Elaziq, acompañado del ministro del Interior, Efkan Ala; el ministro de Defensa, Fikri Isik y el ministro de Salud, Recep Akdag.
