El Cairo.- Partidarios y detractores del depuesto presidente Mohamed Mursi se enfrentaron ayer viernes con piedras, bengalas y con disparos de balines cerca de la plaza Tahrir de El Cairo tras una jornada de protestas.
Los manifestantes levantaron barricadas en el puente 6 de Octubre, sobre el río Nilo, en medio de un ambiente de creciente tensión en la zona.
Según la agencia estatal de noticias Mena, los seguidores de Mursi intentaron llegar hasta la plaza Tahrir, donde se encuentran congregadas miles de personas que secundaron la manifestación convocada por grupos no islamistas y activistas revolucionarios a favor del Ejército.
Los opositores a Mursi impidieron entonces el paso a los islamistas, que se desviaron hacia el citado puente y comenzaron a disparar balines contra los primeros.
El caos se ha apoderado de la zona, donde hay vehículos incendiados y se están lanzando bengalas y fuegos artificiales.
En un comunicado, las Fuerzas Armadas reiteraron ayer su compromiso a proteger a los “manifestantes pacíficos” y advirtieron contra cualquier “acción provocadora”, la cual -dijeron- será castigada de acuerdo a la ley.
El Ejército egipcio depuso el pasado miércoles a Mursi, elegido en unas elecciones celebradas hace poco más de un año, lo que ha sido rechazado por los Hermanos Musulmanes y grupos afines, que hoy se manifestaron para pedir la vuelta al poder del presidente depuesto.
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