in

Icono mexicano de la moda, el estilo y el cine

publicidad

De la Doña se puede decir mucho, era una diabla. Un personaje insustituible dentro del imaginario cinematográfico de nuestro país y que se volvió internacional por su belleza inspiradamente altiva, carácter fuerte y el encanto de diva, de esas que al menos en este país ya no hay.

María Felix, como ícono del estilo, fue una compradora compulsiva de Cartier y obsesiva con los reptiles, si es que hay algo más fantástico que una mujer con tremendo descaro y poderío para colgarse animales que nos comerían de un sólo bocado.

Y como era de esperarse está incluida en El Arte de Cartier una exposición en el Museo Thyssen Bornemisza de Madrid, donde se pueden admirar no solo sus exóticas joyas, sino todo el universo de la casa fundada por Louis-François Cartier en 1847 en París, hazaña que en el tiempo le valió su título de nobleza para convertirse en joyero de Reyes, Rey de los joyeros gracias a Eduardo VII.

De la mano del renombrado director Emilio “Indio” Fernández, La Doña realizó las tres películas que la consagran a nivel internacional: Enamorada (1946), Río Escondido (1947) y Maclovia (1948). La relación entre María y Fernández resultó cordial y sin contratiempos a pesar del fuerte y famoso temperamento del director. 

En Enamorada, María encuentra a su perfecto compañero fílmico, el actor Pedro Armendáriz. Las cintas de María con Fernández y su equipo (Armendáriz, el fotógrafo Gabriel Figueroa, etc.), le darían la vuelta al mundo y tendrían sólida presencia en varios Festivales de Cine internacionales. A su vez, le otorgan a María sus primeros Premios Ariel. En Río Escondido, María demostró tener un talento dramático inesperado. Por otra parte, en Maclovia, donde interpretó a una india tarasca, logró algo muy difícil para ella: parecer humilde.

Entre las películas de Fernández, María también colabora con Roberto Gavaldón, otro director con quien lució algunas de sus mejores interpretaciones. Su primera colaboración fue en La diosa arrodillada (1947), junto a Arturo de Córdova. Gracias a estos filmes, la fama de María cruza el Atlántico.

Contratada por el productor español Cesáreo González, María comenzará su aventura fílmica en Europa. En México solo actuará en la cinta Doña Diabla en 1949, y no volvería a filmar hasta 1952.

El director de la Cineteca Nacional, Alejandro Pelayo, aseguró que para rendir homenaje a María Félix (1914-2002), en el marco del centenario de su nacimiento, se montará una exposición fotográfica en las rejas del inmueble, además de que el próximo 8 de abril se inaugurará la librería Educal, que llevará el nombre de la actriz mexicana.

El funcionario detalló que en las rejas de la Cineteca, donde actualmente se exhiben imágenes sobre el clásico “Distinto amanecer”, se montará una exposición fotográfica dedicada a “La Doña”, en colaboración con Fundación Televisa, aunque aún no se tienen los detalles de su inauguración.

Además, dijo, la librería Educal, que forma parte de la remodelación de la Cineteca Nacional, “está lista y la vamos a bautizar con el nombre de María Félix el próximo 8 de abril, en memoria de la actriz”.

Destacó que no hay mejor manera de rendir homenaje a la protagonista de cintas como “Doña Bárbara”, que a través de su filmografía, por lo que a partir del segundo semestre de este año se exhibirá un ciclo de cine con sus películas más representativas.

CANAL OFICIAL

Golpeado por tubo de una mufa

Ana Ligia debutará como mamá