


Roma.- Una intervención de la comunidad internacional en el norte de Irak es el proceder correcto en la lucha contra los islamistas militantes, consideró hoy el Papa Francisco en su viaje de regreso de Corea del Sur, aunque aclaró que no es lícito bombardearlo ni declararle la guerra.
“Allí donde hay un agresor ilegítimo, está justificado detenerlo. Subrayo el verbo detenerlo, no bombardearlo ni declararle la guerra”, dijo el jefe de la Iglesia católica durante el vuelo de regreso de su viaje a Corea del Sur. La Organización de Naciones Unidas deberá discutir cómo se puede detener al agresor, dijo Francisco, de 77 años.
El Papa destacó que él está dispuesto a trasladarse personalmente al norte de Irak. “En este momento, no es lo mejor que se puede hacer, pero estoy dispuesto”, dijo.
El pontífice argentino advirtió al mismo tiempo de incursiones en solitario. “Una nación sola no puede juzgar cómo detener a un agresor”, y consideró que “Por eso, después de la Segunda Guerra Mundial se creó la ONU, que ahora debe encontrar una solución”.
AGENCIAS

