

Pareciera que a todos los directores de Obras Públicas los parió la misma madre: no saben realizar bien su trabajo. El alcalde Tomás Ríos Bernal debería de visitar la aeropista y conocer las cochinadas que deja el personal de Obras Públicas. De qué le sirvió al Alcalde acudir a la plática de Carlos Kasuga, si no aplica lo supuestamente aprendido. No hay mejora continua en su ciudad, debe recordar que se debe “bien ser, bien hacer y
bien estar”.
