


México.- El sacerdote y fundador del albergue de migrantes La 72 de Tenosique, Tabasco, fray Tomás González, compareció ayer ante el Ministerio Público de esa localidad para responder a una acusación promovida por el agente del Instituto Nacional de Migración (INM), Marvin Agustín Tapia Nava, el pasado 29 de septiembre.
Según la versión del servidor público, “al saludar cordialmente a fray Tomás González, que se encontraba en su camioneta, éste le sujetó la mano y arrancó la camioneta, arrastrándolo por más de 100 metros”.
Además, detalló que a raíz de ese incidente sufrió lesiones corporales.
En un comunicado difundido el miércoles, el albergue negó de manera categórica la versión del oficial de Migración.
A su juicio, la denuncia no sólo es “inverosímil y falsa”, sino que forma parte del “alarmante incremento de la persecución y violenta criminalización del INM hacia las personas migrantes y a quienes desde La 72 les asistimos humanitariamente”.
El comunicado recuerda que desde el año pasado el gobierno mexicano está obligado a asegurar la protección de los integrantes de La 72, a raíz de unas medidas cautelares que dictó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Y precisa que desde hace 10 años “se ha documentado ampliamente la participación sistemática de agentes del INM en hechos delictivos”.
Agencia

