


Córdoba.- En plena conmoción nacional por la desaparición de 43 estudiantes, México celebra los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2014 en el estado de Veracruz, donde tiene un dispositivo de seguridad para evitar que se vean afectados por protestas o incidentes violentos.
La indignación por el brutal ataque que sufrieron en septiembre los estudiantes, quienes se teme que fueron masacrados en una alianza de narcotraficantes y policías en Iguala, desató también protestas estudiantiles desde hace semanas en Veracruz que amenazan con intentar boicotear eventos de los juegos.
El miércoles, manifestantes lograron apagar la llama de la justa centrocaribeña durante uno de los relevos entre portadores de la antorcha en Xalapa, capital del estado de Veracruz.
Entre gritos de “¡No queremos juegos, queremos justicia!”, los manifestantes arrojaron agua a varios corredores que portaban la antorcha hasta lograr apagarla.
Después, estudiantes llegaron a tomar la tarima del estadio Colón de Xalapa, destino de la antorcha, pero finalmente se retiraron y permitieron al joven lanzador de disco veracruzano Rafael Ochoa que encendiera el pebetero.
Autoridades locales y universitarias han pedido a los estudiantes que, para no dañar la dañada imagen actual de México, respeten este evento deportivo en el que competirán casi 8.000 deportistas de 31 países, incluidos medallistas de oro olímpicos como la ciclista colombiana Mariana Pajón y el boxeador cubano Roniel Iglesias.
Los gobiernos locales y federales desplegarán a unos 7 mil policías y 500 militares para los 800 eventos deportivos que se celebrarán hasta el 30 de noviembre en las cinco sedes de los juegos: Xalapa, Coatzacoalcos, Córdoba, Tuxpan y la ciudad de
Veracruz.
Con información de Notimex

