
Fortín.- Desde el 2005 que se abrieran las puertas del parque de floricultura, éste ha sido el primer año que las autoridades municipal deciden cobrar una “cuota”.
El director de Comercio, Leonel de Jesus Hernández Cobos, hizo una visita a los floristas -desde enero- para darles a conocer que tendrían que pagar 80 pesos al mes, a fin de que sirvieran de fondo económico para el mantenimiento del lugar.
En caso de que los 25 comerciantes paguen su cuota, el Ayuntamiento estaría teniendo un ingreso mensual de dos mil 080 pesos, que si bien no es mucho, tampoco se conoce hacia dónde
van a parar.
En un inicio, las autoridades se habían comprometido a arreglar el techo, una de las principales peticiones de los floristas, pero tampoco en eso han cumplido, mucho menos en los quehaceres menores como los de limpieza, pese a que ahí se albergan dos direcciones, Protección Civil y Fomento Agropecuario.
Al estar en el abandono, la Secretaria general de viveristas y floristas, Silvia Martínez Rodríguez, consideró necesario un informe detallado, en donde se les dé a conocer, quienes pagan, cuándo capta al mes el Ayuntamiento, pero sobretodo, qué sucede con este dinero, en qué se aplica.
tomados en cuenta
La entrevistada reconoció que no es el primer año que quedan en abandono, aunque en esta ocasión además de estar olvidados, se les cobra una cuota que estuvieron de acuerdo en pagar por la desesperación de cooperar con el rescate del parque.
Entre las promesas de Armel Cid, hechas al inicio del año, quedaron el cambio de la lámina, mantenimiento de áreas verdes, así como más difusión, que urgen a los comerciantes.
Claman ser escuchados
Con una venta apenas del 30 por ciento, Martínez Rodríguez, urgió al alcalde Armel Cid a que los apoye con más difusión, para que la gente sepa que siguen en pie.
De tal forma y ante la falta de compromiso como de claridad en las cuentas, la representante de los comerciantes pidió ser escuchada para que las autoridades les aclaren el destino de su cuota, pues al parecer no se está aplicando a lo que se prometió.
Celia DÌaz
El Buen Tono
