

Redacción
Tlilapan, Ver.— El primer debate entre aspirantes a la presidencia municipal de Tlilapan evidenció, una vez más, la falta de preparación, conocimiento en administración pública y desconexión con las verdaderas necesidades de la población. A pesar de tratarse de un municipio pequeño, los candidatos Beatriz Urbano Lastre (Morena-Verde), Reyna Sofía del Valle López (MC), Leonor Martínez Hernández (PAN) y Germain Tiburcio Aguas (PT) no lograron presentar propuestas concretas que respondieran a las problemáticas más urgentes.
Los participantes centraron sus discursos en señalar el rezago social y la falta de conectividad digital, pero sin ofrecer soluciones viables ni detallar mecanismos de implementación. La mayoría repitió promesas genéricas sobre mejorar servicios básicos y “estar cerca de la gente”, sin explicar cómo lo lograrán. Llamó la atención que ninguno abordó temas cruciales como la prevención de incendios forestales, que han afectado a la región en los últimos años, ni estrategias para fortalecer la infraestructura del municipio.
El desinterés fue evidente: Leonor Martínez (PAN) se ausentó parcialmente del debate por fallas en su conexión y fue regañada por ignorar el desarrollo del encuentro. Mientras tanto, el formato del OPLE y el bajo nivel del debate demostraron que, más allá de las buenas intenciones, lo que falta es visión, capacidad y compromiso con una agenda municipal seria. En lugar de claridad, Tlilapan recibió un desfile de lugares comunes y evasivas.
