

De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Bajo un cambio de dirección que prometía renovar la gestión, el Hospital General de Córdoba “Yanga” sigue sumido en la opacidad, el desabasto de medicamentos y denuncias de trato negligente hacia pacientes y familiares.
A pesar de la llegada de otra administración en enero de 2024, las quejas por la falta de insumos médicos y la resistencia a rendir cuentas persisten, obligando a la ciudadanía a mecanismos legales para exigir respuestas.
Tras meses de abandono institucional y reclamos por opacidad, el Hospital General de Córdoba “Yanga” recibe otro administrador: César Rubén Vázquez Portilla, nombrado por la Secretaría de IMSS Bienestar en un intento por contener la crisis que estalló con la renuncia de su antecesora, Fabiola Guerrero.
Guerrero abandonó el cargo en medio de tensiones con el director del hospital, Roberto Carlos García, a quien trabajadores acusan de centralizar decisiones bajo un estilo de gestión autoritario. Fuentes aseguran que la ex administradora enfrentó obstáculos para ejercer sus funciones, debido a las “órdenes irracionales” y la injerencia desmedida de García, descrito por empleados como una figura que “concentra el poder como si el hospital fuera su feudo”.
La designación de Vázquez Portilla llega en un contexto crítico: el nosocomio arrastra denuncias por desabasto de medicamentos, trato negligente a pacientes y ahora, una fractura administrativa. Aunque IMSS Bienestar no detalló las causas de la salida de Guerrero, el movimiento ocurre tras semanas de presión de colectivos que exigían intervención ante la aparente disfuncionalidad en el liderazgo.
Trabajadores, que piden anonimato por temor a represalias, advierten que el problema de fondo no es la figura administrativa, sino un modelo de gestión que prioriza el control sobre la eficiencia.
La Secretaría se limita a afirmar que “se garantizará la estabilidad del hospital”, sin referirse a las acusaciones contra García. Mientras, pacientes y empleados esperan que el cambio no sea sólo de nombre, sino de estructuras.
La Secretaría de Salud anunció, en su momento, que la renovación del equipo directivo busca “optimizar servicios y garantizar transparencia”. Sin embargo, documentos obtenidos mediante solicitudes de acceso a la información revelan que, entre febrero y mayo de 2024, el 40 % de las recetas médicas no fueron surtidas completamente, cifra que supera el 35 % registrado en igual periodo de 2023.
