

Efraín Hernández
El Buen Tono
Trabajadores de la Delegación Regional del Bienestar en Córdoba denunciaron que Óscar Carmona Oropeza los está obligando a operar políticamente a favor del Partido Verde Ecologista de México, en un evidente uso faccioso del aparato gubernamental con fines personales y electorales.
Las denuncias señalan que el delegado ha coaccionado a empleados para realizar brigadismo a favor del impugnado Manuel Alonso Cerezo —vinculado al crimen organizado y señalado como líder del llamado Cártel Inmobiliario—, así como del aspirante a la alcaldía de Fortín, Eduardo Alonso García Viveros. La instrucción fue girada desde un grupo de WhatsApp oficial de la delegación, donde Carmona Oropeza advirtió que no se permitiría operar a favor de Morena y que todo el respaldo debía concentrarse en el Partido Verde.
De acuerdo con los testimonios, el funcionario estaría condicionando la permanencia laboral de los empleados: quienes se niegan a participar en las actividades proselitistas son amenazados con ser despedidos. Bajo este esquema de presión, personal de programas federales ha sido movilizado para fortalecer las campañas en curso.
