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Ciudad de México.– El piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez habló sin tapujos sobre su salida de Red Bull Racing y el incierto rumbo de su carrera en la Fórmula 1, durante una entrevista en el podcast Desde el Paddock, conducido por Memo Rojas, Alex Escalera y Munir. En el espacio, el tapatío reveló detalles de su última temporada, las tensiones dentro del equipo y su visión del futuro.
Pérez, quien salió de la escudería a pesar de tener un contrato firmado por dos años más, aseguró que no espera una disculpa formal de Red Bull, aunque reconoció que las decisiones de la directiva generaron una presión innecesaria que terminó afectando su rendimiento y el de su equipo técnico.
“Cuando firmo el contrato en Mónaco, a partir de la siguiente carrera ya todo el mundo hablaba de mi futuro. Tan fácil como que el equipo saliera a decir que yo tenía un contrato por dos años. Esa incertidumbre nos afectó a todos”, explicó el piloto.
Checo señaló que la presión mediática y los rumores constantes impactaron no solo su desempeño, sino también la moral de sus ingenieros. “Al final, esa presión llegó muchísimo a los ingenieros. Eso nos acabó costando mucho”, confesó.
Sobre la actual situación de Red Bull, Pérez fue directo pero diplomático: “No me da gusto verlos en un mal momento, pero sí sé que están muy arrepentidos. Aunque no me deben una disculpa, ellos mismos generaron esa presión”, comentó entre risas, dejando entrever tensiones internas en la escudería que lidera Max Verstappen.
A pesar de los roces, Checo no dudó en reconocer el talento de su excompañero: “Max se merece todo el éxito que está teniendo”, declaró.
En cuanto a su futuro, el mexicano fue claro: no tiene prisa por volver a la F1 si no se presenta un proyecto que lo convenza. “No quiero ser tercer piloto ni estar esperando una oportunidad. Si llega el proyecto correcto, lo tomaré. Si no, buscaré otra dirección”, afirmó.
