


Sandra González
El Buen Tono
Orizaba, Ver.– A pocos días de que se cumpla una semana del fatal accidente ocurrido en la glorieta de Sur 10 y Poniente 7, en el que perdió la vida Raquel, trabajadora del departamento de Ecología, Parques y Jardines, el Ayuntamiento de Orizaba sigue guardando silencio. No se ha emitido ni una sola declaración oficial sobre su posible responsabilidad ni sobre una indemnización para la familia de la empleada, quien murió mientras realizaba funciones sin el abanderamiento adecuado y bajo condiciones climáticas adversas.
“Ella estaba en horario laboral y no había señalamientos que protegieran su integridad física.
Muchos trabajadores de Limpia Pública siguen expuestos de la misma forma; es decir, sin equipo, sin señalética, saliendo repentinamente al paso vehicular para cumplir su trabajo. Es una tragedia que pudo evitarse”, denunció Ángel García Gómez, representante de Derechos Humanos de la Capellanía Armada Mundial de Paz en México.

