


Nueva York vivió una noche inolvidable en la final del Mundial de Clubes 2025, no solo por el contundente 3-0 del Chelsea sobre el PSG, sino también por un espectáculo de medio tiempo que combinó reguetón, pop, inclusión y una gran sorpresa: Coldplay.
El escenario no estuvo en el centro del campo como en el Super Bowl, sino estratégicamente colocado en las gradas del MetLife Stadium, donde más de 70 mil aficionados presenciaron una presentación artística que marcó un antes y un después para este torneo.
El primero en encender la fiesta fue J Balvin, quien hizo retumbar Nueva York al ritmo de “Mi gente” y “Reggaetón”, vestido completamente de blanco y con toda la vibra latina desbordando en el estadio.
Luego fue el turno de Tems, la cantante nigeriana que, desde lo más alto del estadio, trajo una potente presencia africana al show. Más tarde, Doja Cat deslumbró con un brillante vestido que simulaba un jersey blaugrana y cantó “Woman”, encendiendo al público con su energía.
Pero la gran sorpresa fue Coldplay. Aunque no estaban anunciados, la banda británica liderada por Chris Martin apareció de forma inesperada interpretando “A Sky Full of Stars”. El momento más emotivo lo protagonizó una joven cantante con discapacidad en los brazos, quien entonó el tema con una emotividad que conmovió a todo el estadio.
Para cerrar, todos los artistas se unieron en un acto estelar que transmitió un mensaje claro: el fútbol está cambiando, y este nuevo Mundial celebra la inclusión, la diversidad y el amor.
Antes del pitazo inicial, Robbie Williams y Laura Pausini también hicieron lo suyo con la presentación de “Desire”, el nuevo himno oficial de la FIFA. Williams lució un traje blanco con detalles dorados, mientras que Pausini brilló en negro interpretando parte del tema en español.
🎶 El medio tiempo ya no dura solo 15 minutos
Debido a la magnitud del show, el descanso se extendió hasta los 23 minutos, superando los reglamentarios 15 establecidos por la FIFA. Eso sí, sin necesidad de montar o desmontar escenario, lo que permitió un espectáculo fluido e impactante.
Sin duda, la final del Mundial de Clubes 2025 no solo quedará en la historia por lo deportivo, sino por haber elevado el nivel del entretenimiento en el fútbol internacional.

