


De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba, Ver. — La intensa tromba que sacudió la ciudad esta tarde dejó a su paso más que calles inundadas: un panorama de improvisación vial y el recordatorio de una infraestructura que clama por un mantenimiento olvidado.
El caos se instaló temprano en un punto neurálgico. Un rayo impactó cerca del crucero El Diamante, en la entrada al bulevar Tratados de Córdoba, dejando sin funcionamiento los semáforos. Autoridades de Tránsito reportaron el envío de unidades para regular el flujo vehicular, urgiendo a los conductores a “manejar con precaución”.
Sin embargo, la imagen más crítica se repitió bajo el paso a desnivel de la Estación del Ferrocarril. Allí, como en anteriores aguaceros, la lluvia cayó “a chorros”, transformando el sitio en una trampa para automovilistas.
Este comportamiento no es nuevo, sino consecuencia directa de una obra cuya gestión durante la administración de Leticia López Landero ha sido calificada por vecinos como “deleznable”.

