De la redacción
El Buen Tono
Orizaba.- Dicen que en Orizaba todo florece: el turismo, los eventos, los murales… y ahora también los hoyos. Los vecinos tienen un nuevo atractivo turístico en la prolongación de Camerino Z. Mendoza, justo en la unidad habitacional El Mirador de la colonia Barrio Nuevo. Con más de 15 días sin atención, un enorme bache se ha vuelto parte del paisaje cotidiano para los vecinos. ¿Lo mejor? No paga predial, pero ya se adueñó de la calle.
Día tras día ha crecido sin parar, como si esperara convertirse en un socavón modelo para alguna exposición municipal.
Vecinos han reportado el bache varias veces al gobierno de Juan Manuel Diez, sin respuesta. Sin embargo, la administración parece tener mejores cosas que hacer: rehabilitar calles y banquetas en buen estado, talar árboles a diestra y siniestra sin estudios de impacto ambiental, violar la Agenda 2030 de la ONU o presumir lo “mágica” que es la ciudad. Tan mágica, que aquí los baches se reproducen solos.
Vecinos han tenido que modificar rutas peatonales; ciclistas sortean el cráter como si entrenaran para el Tour de Francia. Un motociclista incluso estuvo a punto de volar directo al centro de la Tierra.
Mientras la ciudad presume limpieza, mantenimiento y premios al “mejor destino”, el hoyanco crece y gana simpatizantes. Algunos ya proponen colocarle una placa; otros, consideran organizarle una fiesta de quince días por su permanencia ininterrumpida.
