


AGENCIA
Nacional.- El consumo de los mexicanos continúa mostrando señales de debilidad. Según estimaciones adelantadas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) a través del Indicador Oportuno del Consumo Privado (IOCP), en junio y julio el gasto en bienes y servicios caerá a tasa anual 0.1 por ciento (%) y 0.4%, respectivamente, aunque a nivel mensual se prevén incrementos modestos de 0.3% y 0.6%.
Estos datos se suman a la caída de 1% registrada en mayo frente al mes anterior, que marcó el mayor retroceso del año, mientras que la contracción anual fue de 0.9%, retomando la tendencia negativa tras un breve repunte en abril. Especialistas atribuyen esta desaceleración a un menor crecimiento económico, inflación persistente, altas tasas de interés, debilitamiento del empleo y las remesas, así como a la incertidumbre comercial y política.
El panorama económico general también muestra señales preocupantes: El Fondo Monetario Internacional (FMI) proyecta un crecimiento de 0.2% para 2025; la OCDE estima 0.4% y la Cepal 0.3%, las cifras más bajas entre los países de América Latina.
El consumo privado es clave, pues refleja el comportamiento de los hogares en bienes y servicios como alimentos, transporte, educación, salud y entretenimiento, representando alrededor del 70% del Producto Interno Bruto (PIB). Su caída prolongada indica una pérdida de dinamismo económico que podría impactar la recuperación y estabilidad del país.


