


La Casa Blanca sorprendió este martes al abrir una cuenta oficial en TikTok, a pesar de que la red social de origen chino enfrenta un panorama legal incierto en Estados Unidos. La administración de Donald Trump ha advertido que la aplicación será prohibida el próximo 17 de septiembre si no se alcanza un acuerdo con las autoridades chinas que permita desligar a la plataforma de su matriz, ByteDance.
En apenas sus primeras cuatro horas de operación, el perfil oficial ya había sumado más de 38.000 seguidores, destacando en su descripción la frase: “Bienvenidos a la época dorada de Estados Unidos”. Hasta ahora, la cuenta ha publicado dos videos: el primero con imágenes de Trump en eventos públicos e interacciones con ciudadanos, y el segundo mostrando la Casa Blanca.
“¡Estados Unidos, estamos de vuelta! ¿Qué hay de nuevo TikTok?”, se lee en el primer clip de 27 segundos, donde la voz del presidente afirma: “Todos los días me levanto determinado para entregar una mejor vida a las personas a lo largo de esta nación. Yo soy su voz”.
La apertura de la cuenta llega en un momento clave. El secretario de Comercio, Howard Lutnick, reiteró en julio que TikTok “se irá a negro” si no se concreta la creación de una nueva sociedad que opere la aplicación bajo control de un inversor no considerado “adversario nacional”.
El conflicto con TikTok no es nuevo. Durante el mandato de Joe Biden (2021-2025), el Congreso ya había aprobado una ley que obligaba a la aplicación a desvincularse de ByteDance. Incluso, en enero, TikTok llegó a interrumpir temporalmente sus operaciones en EE.UU. hasta que Trump, en su primer día de regreso a la Casa Blanca, firmó una orden ejecutiva que concedía una prórroga de 75 días.
Posteriormente, el presidente extendió el plazo en dos ocasiones más, siendo la última el pasado 19 de junio, con una nueva fecha límite fijada para el 17 de septiembre.
Más allá de la incertidumbre, la estrategia parece clara: TikTok se ha convertido en un canal clave para conectar con los votantes más jóvenes, y la Casa Blanca busca aprovecharlo antes de que se defina el futuro de la plataforma en Estados Unidos.

