


Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- El alcalde Juan Martínez Flores se apresura a culpar a las empresas de cable por los retrasos en la obra de la Calle 9, pero una red de contrataciones opacas y favoritismos políticos se teje desde el Ayuntamiento de Córdoba. “La oligarquía cordobesa se empeñó en aprobar esa obra caprichosa que, como estamos viendo, se está ejecutando mal”, denunció el regidor sexto.
La evidencia de esta maquinaria de opacidad se materializa en el contrato AD/09/FISCALES/2024/01, otorgado por la síndica municipal Vania López González el pasado 27 de febrero. Por un monto de 2 millones 88 mil pesos, la empresa chiapaneca “Consultoría Inteligente Multidisciplinaria y de Asistencia, S.C.” fue contratada para realizar servicios descritos con una ambigüedad que raya en lo absurdo: “análisis, estudio, revisión y emisión de determinaciones”.
Los servicios pactados, que incluyen “elaboración de análisis preliminar” y “cumplimiento de objetivos” sin ninguna meta cuantificable, carecen de indicadores verificables. Esto convierte el millonario desembolso en un acto de fe que beneficia a unos cuantos.
El beneficiario, Andoni Valverde Ambriz, representa una firma con estrechos y documentados lazos con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Esta misma consultora es la única que ha facturado al partido verde, con 1.3 millones de pesos, durante la gira del exgobernador de Chiapas y precandidato presidencial Manuel Velasco Coello. El circuito de contratación preferente se completa con el dato de que la empresa se constituyó en una notaría de Tuxtla Gutiérrez, ciudad natal de Velasco, lo que sugiere un maquillaje técnico de corrupción que opera a costa del erario público.
El contrato, impulsado personalmente por la síndica López González bajo una “excepción de ley”, se financió con recursos del fideicomiso de parquímetros. Este fondo —que acumula 47 millones de pesos en una década— opera con opacidad, sin beneficios visibles para la ciudadanía, y se ha usado para financiar estudios fantasma y obras mal ejecutadas.
La obra de la Calle 9 ejemplifica el sistema fallido: el regidor Sergio De la Llave denunció su oposición inicial al desvío de cuantiosos recursos del fideicomiso de parquímetros hacia este proyecto mal ejecutado. La oligarquía cordobesa impuso una “obra caprichosa” de pésima ejecución, con negligencias graves como un sistema para invidentes con material resbaladizo que pone en riesgo a la ciudadanía.
Las palabras del regidor señalan al verdadero poder detrás: una oligarquía que impone sus intereses sobre las necesidades reales de la población.

