


Agencias
Veracruz.- La región norte de Veracruz enfrenta graves afectaciones tras las intensas lluvias registradas del 6 al 10 de octubre, que dejaron más de 280 milímetros cúbicos de agua, arrasando con cultivos de naranjales, caña, maíz y café, así como caminos sacacosechas y pozos de agua potable.
Vecinos de comunidades como Vista Alegre relataron la difícil situación que atraviesan. Maribel Pérez Martínez, una de las afectadas, señaló: “Aquí todo esto eran naranjales, pero el agua se lo llevó todo. Todo se perdió y hasta ahora no hemos recibido ayuda”. Los pobladores deben caminar kilómetros para obtener víveres y agua, mientras observan cómo los helicópteros de asistencia sobrevuelan la zona sin detenerse.
Ponciano, productor de cítricos, expresó su preocupación por el futuro de las cosechas: “No sabemos qué pasará hasta que volvamos a tener árboles para cosechar y comercializar naranjas”. La ganadería también sufrió pérdidas, con animales muertos por las inundaciones.
Hasta el momento, la Secretaría de Bienestar informó que en Veracruz se han censado 24 mil 525 viviendas afectadas, de un total de 38 mil 872 en cinco estados del país. Los municipios más impactados son Poza Rica, con 27 fallecimientos confirmados y múltiples colonias bajo el agua, y Álamo Temapache, con más de 5 mil viviendas afectadas y personas desaparecidas.
Las autoridades han declarado la suspensión de clases en todos los niveles educativos del 18 al 25 de octubre en la región norte, mientras personal estatal y municipal trabaja en labores de limpieza de calles, viviendas y restablecimiento de servicios públicos.
La comunidad exige apoyo inmediato y acciones concretas para recuperar sus cultivos y garantizar la subsistencia de las familias afectadas, mientras enfrentan un panorama de pérdida y desolación.

