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Inundaciones devastan 80% de los cultivos de naranja en Veracruz

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Agencias

Álamo Temapache, Ver.- Las lluvias e inundaciones registradas la semana pasada dejaron un panorama devastador en el norte de Veracruz. Productores de naranja de este municipio, considerado el centro citrícola más importante del país, reportan pérdidas de hasta 80 por ciento de las hectáreas cultivadas tras la crecida del río Tuxpan.

La magnitud del desastre amenaza con golpear de manera severa la economía y el empleo en la región. Agricultores advierten que, sin apoyo urgente, miles de familias podrían verse forzadas a migrar o endeudarse para sobrevivir.

En comunidades como Hidalgo Amajac y Kilómetro 33, los huertos fueron literalmente arrancados por la corriente. Don Tomás Cruz Hernández, productor local, perdió más de 200 árboles de naranja, el trabajo y la inversión de medio año. “El agua se llevó todo. Donde estaban los naranjos, ahora solo hay tierra seca y grietas”, lamentó.

La falta de obras de contención, como gaviones o muros de protección, ha acelerado la erosión de los márgenes del río Tuxpan, que año con año “se come” más terreno. Agricultores aseguran que, sin medidas urgentes, el río continuará desplazándose y destruyendo lo poco que queda de los cultivos.

De acuerdo con cifras oficiales, Álamo Temapache aportó en 2023 más de 27 por ciento de la producción estatal de naranja, con más de 43 mil hectáreas cultivadas y una derrama económica superior a mil 700 millones de pesos. Este golpe al campo veracruzano podría afectar la posición de México como quinto productor mundial de cítricos.

El ingeniero agrónomo Michael Pazarón advirtió que “se vienen tiempos muy difíciles, porque sin agricultura no hay economía, y sin economía la gente se queda sin opciones”. La falta de ingresos podría empujar a algunos a emigrar o incluso a caer en manos del crimen organizado, señaló.

Pese a la crisis, algunos productores mantienen la esperanza. Adalberta Cabrera del Ángel, agricultora local, confía en que el sector pueda recuperarse si las autoridades actúan con rapidez. “Hemos superado plagas y enfermedades, y volveremos a levantarnos. Pero necesitamos que la presidenta Claudia Sheinbaum y la gobernadora Rocío Nahle nos escuchen y apoyen con programas de rescate agrícola”, pidió.

La situación en Álamo Temapache exige atención inmediata. La reconstrucción del campo veracruzano será larga, pero los naranjeros no están dispuestos a rendirse.

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