Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- La Cámara Nacional de Comercio (Canaco) anunció que la próxima edición de El Buen Fin 2025 integrará el sello Hecho en México, sin embargo, choca frontalmente con una práctica: la saturación del mercado con productos festivos de manufactura china, incluso en celebraciones emblemáticas de la identidad nacional.
A semanas de las fiestas patrias, un recorrido por comercios cordobeses revela una contradicción. Banderines tricolores, moños, sombreros y adornos alusivos al mes patrio exhiben, de forma casi dominante, la etiqueta Hecho en China.
Este fenómeno no es nuevo ni aislado. Como documentan reportes previos de este medio, la invasión de productos asiáticos es una constante que atraviesa el ciclo festivo mexicano: desde los coloridos artículos del Día de Muertos hasta esferas, luces y pinos navideños, el sello asiático domina los aparadores.
Aunque las cámaras empresariales promueven el consumo de lo nacional en campañas como El Buen Fin, no apelan al sentimiento patrio para impulsar ventas en septiembre, sus propios afiliados abarrotan los anaqueles con mercancía importada.
Los datos económicos subrayan la magnitud del problema. China se consolida como el segundo socio comercial de México, con una inversión extranjera directa que representó el 20.5 % de las importaciones en el primer trimestre de 2024.
En Córdoba, las importaciones desde Vietnam y China superaron los 25 millones de dólares en 2023, desplazando progresivamente a productos y comercios nacionales. Esta dependencia se vuelve especialmente cínica cuando se trata de objetos cargados de significado cultural. El sello Hecho en México se vuelve eslogan vacío cuando la representación patria se terceriza y se vende al postor.


