

Yanga.- Sólo daños a las viviendas del centro, malos olores y “ganancias” externas para ediles es lo que deja el Festival de la Negritud, que este 2013 presentó como único acto cultural una exposición fotográfica y bailes folclóricos por las tardes.
En general, los nueve días del festival son dedicados a la venta de bebidas embriagantes, a los bailes masivos y a la comercialización de comida, lo cual afecta en últimas fechas a los habitantes de la zona.
“No se pude venir a ciertas horas a ver los espectáculos con los hijos, porque no faltan los conatos de bronca y los pleitos entre gente que está bajos los efectos del alcohol, pero eso se debe a que hay una venta increíble de cervezas”, señalaron algunas profesoras.
Y es que en reunión sostenida ayer jueves en el Palacio municipal, un grupo de mujeres y hombres encararon a los ediles Pascual Alvarado, Enrique Jiménez Ávalos y Ana Luisa López, ante la falta de eventos culturales y el exceso en la venta de cerveza.
Aunado a ello, el Palacio municipal se convierte en la cantina más grande de la zona centro del estado, pues en todo el edificio son colgados pendones de la cervecería, así como en las palmeras, colgando reatas, luces y todo lo que se puede de postes, árboles y lo que se tenga al alcance.
“Estamos hartos de que esto parezca un burdel, es una miadera por todos lados, las banquetas, las calles y las casas de aquí cerca apestan a orines, todo este lugar está atascado de carpas, mientras que la fiesta original que es en honor a San Lorenzo, se tiene que alejar del centro porque en realidad no hay ni donde pasar”, expresaron los manifestantes.
Lo que inició como una plática, llegó incluso a levantar los ánimos entre los presentes y el síndico único, Enrique Jiménez Avalos, a quien le fue echado en cara su falta de compromiso con el Ayuntamiento, al salir de vacaciones 15 días con destino Estados Unidos.
“No es posible que apenas estés llegando y no sepas de los problemas que existen en el Ayuntamiento, cada vez estamos peor, desconocemos a dónde van a parar los fondos recaudados por los permisos”, expresaron.
Y es que reiteraron su molestia porque en los últimos años de la fiesta de Yanga, no existe la suficiente vigilancia, además de haber un total descontrol en el sistema de entrada de dinero, lo cual se supone debería estar a cargo de Tesorería.
SIN FONDOS CARNAVAL DE YANGA
Se estima que año con año, la actual administración recibe en caja unos $100 mil por los permisos de la cervecería, que esta vez es la Superior, donde se estima una entrada de $70 mil que fueron confirmados por el alcalde Pascual Alvarado.
Mientras que se conoció que los empresarios de los juegos mecánicos entregaron alrededor de $30 mil, es decir un total de $100 mil, con lo que se supone se pagan los artistas que se presentan en el teatro del pueblo.
“La cervecería nos da 70 mil pesos, con eso pagamos a los artistas y contratamos algunos otros servicios, con el compromiso de las ventas, para eso usamos el dinero”, dijo Pascual Alvarado con respecto al tema.
Sin embargo, existen rumores de que a la fecha, la administración municipal no ha pagado la presencia de los artistas, incluso el miércoles pasado se había tambaleado la presencia de Nahomi Klain, una imitadora del programa televisivo “Parodiando”.
CAMBIARÁN EL FESTIVAL DE SEDE
En la reunión sostenida con los manifestantes en Yanga, el síndico único Enrique Jiménez Ávalos aseguró que el Festival o Carnaval cambiará su sede el año entrante hacia el parque del Negro Yanga.
“De buena fuente me enteré que el carnaval ya no se hará para el próximo año en la explanada del parque, sino que lo cambiarán al Negro Yanga, ahí será para la nueva administración la fiesta y los bailes”, expresó.
Sin embargo, reconoció que esto podría provocar una serie de problemas entre los habitantes de aquella zona, “lo más seguro es que se opongan, igual que en el centro, por el exceso de ruido y de los malos hábitos de las personas que ingieren bebidas embriagantes”, refirieron.
José Vicente Osorio Vargas
El Buen Tono
