


DE LA REDACCIÓN
El Buen Tono
Córdoba.- La creciente violencia que afecta a Córdoba y sus municipios vecinos ha dejado en alerta al pequeño comercio de la ciudad, luego de la ejecución del propietario de una joyería en el corazón del centro urbano.
La Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope) Córdoba demandó a las autoridades reforzar las medidas para garantizar la seguridad de la población y los comercios.
Este homicidio forma parte de una jornada violenta que se extendió a varios municipios de la región, reflejando una crisis de inseguridad generalizada.
Marcela López Huerta, representante de Canacope en Córdoba, señaló que la situación ha alcanzado niveles alarmantes, evidenciando la extrema vulnerabilidad en la que se encuentran tanto ciudadanos como comerciantes.
Además de enfrentar dificultades económicas, los pequeños negocios ahora sufren el impacto directo de la violencia, situación que obliga a las autoridades a intensificar su respuesta para proteger a la comunidad.
Este lamentable suceso expone la carencia de capacidad o voluntad de las autoridades municipales para garantizar la seguridad pública.
La administración saliente de Juan Martínez Flores, que comenzó su mandato en medio de episodios violentos, parece concluirlo en un escenario similar, dejando una percepción de impunidad e ineficacia.
Un informe de la Secretaría de Seguridad Pública revela que las colonias con más índices criminales son: Erasmo Castellanos, El Refugio, Agustín Millán, Miraflores, Dos Caminos, Villa de las Flores, San José y el centro de Córdoba.
Aunque estas cifras son indicativas, representan solo una fracción del problema real que enfrenta la ciudad.
El homicidio del comerciante simboliza la falta de protección efectiva y lanza un llamado urgente para que las autoridades municipales asuman su responsabilidad de garantizar la seguridad de las personas. La demanda es clara: se requiere una respuesta inmediata y eficaz, que hasta ahora no se ha materializado.

