De la Redacción
El Buen Tono
Coscomatepec. Vecinos de la colonia Úrsulo Galván, ubicada en la cabecera municipal, expresaron su preocupación por la contaminación del río Tlacuapa, que empeoró desde que las autoridades municipales comenzaron a verterle escombros.
Explicaron que los desechos provienen de las obras que realizan en las calles, “es una agresión al medio ambiente que inició en noviembre del año pasado, nos inquieta su conexión con afluentes de la zona baja”.
Criticaron que, a pesar del daño al cuerpo de agua, hasta el momento las autoridades de la Procuraduría Estatal del Medio Ambiente (PMA), se muestras omisas, “lo cual también es corrupción”.
Consternados por la falta de acciones correctivas, añadieron que el problema llegó a tal punto que actualmente cualquier persona acude al área para arrojar basura, incluyendo plásticos, botellas, vidrio y animales muertos.
Informaron que los desechos provenientes del panteón municipal también van al río, sin intervención de ninguna autoridad para detener dicha práctica nociva que permite el alcalde, José Luis Alonso Juárez, “Faroles”.
Exigencia
Los pobladores hicieron un llamado urgente a las autoridades de la PMA para que analicen la gravedad del problema.
Exigieron que se tomen medidas inmediatas para evitar la continua contaminación del agua y del suelo.
“Es necesario que reconozcan las consecuencias negativas que el hecho podría tener para el futuro, todos estamos en riesgo”, manifestaron.
La falta de intervención por parte de las autoridades municipales generó frustración y temor entre los residentes, quienes temen que la contaminación pueda afectar la salud de la comunidad y causar daños irreversibles en el ecosistema local.
