


ACATLÁN.- Ataviado con su bata blanca y cargando un maletín de instrumentos médicos, desde muy temprana hora, un galeno peregrina desde la comunidad de Cuitláhuac para ofrecer sus servicios de puerta en puerta y a bajo costo, esperando llevar el sustento hasta su hogar, donde también tiene su consultorio pero a causa de la precaria situación económica que se vive no genera las ganancias suficientes.
Desde las 05:00 horas, el doctor Martín Illescas, egresado de la Universidad Veracruzana, emprende su viaje, en esta ocasión los sitios elegidos fueron Acatlán de Pérez Figueroa y Vicente Camalote.
Su presencia es diferente a la que mucho tienen la idea formada en sus mentes, sobre un médico general (usualmente detrás de un escritorio), pero la falta de empleo y la automedicación aunado al auge de las consultas en las farmacias afectan su desempeño laboral.
“La situación es difícil y uno no puede darse el lujo de rendirse, hay que autoemplearse y si no basta con tener un consultorio propio pues este es el resultado, salir a buscar al enfermo, no hay trabajo y es bien sabido”, dijo el médico.


