Agencias
Hunter Biden, hijo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, fue declarado culpable por un jurado de 12 personas en la corte de Wilmington, Delaware, de realizar falsas acusaciones en su solicitud para adquirir un arma de fuego en 2018. Se le acusa de mentir al afirmar que no era adicto ni consumía drogas ilegales cuando era consumidor de crack. Este veredicto podría resultar en una pena de prisión de hasta 25 años para Hunter, de 54 años de edad.
La familia presidencial, incluida la Primera Dama Jill Biden, ha evitado hacer declaraciones públicas sobre el caso, pero han demostrado solidaridad con Hunter. La fiscalía presentó pruebas durante el juicio, incluyendo testimonios de ex parejas y fotografías que muestran a Hunter con parafernalia relacionada con drogas, para demostrar que mintió en su solicitud de compra de armas.
Este veredicto complica aún más la situación legal de Hunter, quien también enfrenta cargos de evasión fiscal en California. Aunque técnicamente su padre podría otorgarle un perdón presidencial, la condena potencial de 25 años de prisión representa un giro significativo en la vida del hijo del presidente, quien ha luchado públicamente contra adicciones y problemas legales.
