


Adriana Estrada
El Buen Tono
Orizaba.- La alarmante frecuencia de casos de acoso sexual en el transporte y otros espacios públicos en la región ha puesto en evidencia la ineficacia de la Fiscalía Regional y la Fiscalía General del Estado, instituciones que —señalan colectivos feministas— han sido omisas ante los señalamientos de violencia contra mujeres y niños, al no garantizar procesos accesibles ni justicia para víctimas.
“Es urgente que las autoridades apliquen medidas preventivas, sobre todo que no tengan que enfrentarse a un burocratismo a la hora de acudir a denunciar”, señaló Luz María Reyes, del Colectivo Marea Verde.
“El acoso sexual es una de las problemáticas más recurrentes que enfrentamos las mujeres, sobre todo en el transporte público, un espacio del que tenemos necesidad de ocupar diario para trabajar, estudiar o atender a nuestras familias”, señaló.
Criticó duramente a las autoridades, pues a pesar de que cada vez hay más víctimas, no implementan medidas efectivas ni se actúa con contundencia contra los agresores para que no cometan delitos como agresiones físicas (como sucede con el caso de Carlos Vergara, quien enfrenta denuncias por golpeador de mujeres sin que hasta la fecha se le haya hecho justicia a las afectadas).
Destacó que, otro obstáculo grave que enfrentan las mujeres es la burocracia que al intentar formalizar sus denuncias, aunado a la revictimización, las mujeres se topan con un laberinto de trámites burocráticos que las inhibe a continuar con el proceso, quedando libres y reinciden.

