


De la redacción
El Buen Tono
Amozoc, Pue.- La tranquilidad de Amozoc se vio interrumpida tras la desaparición de al menos 12 personas, entre ellas un menor de edad, luego de acudir a supuestas ofertas de trabajo. Los casos, que inicialmente parecían aislados, hoy muestran un patrón preocupante que preocupa a familiares y autoridades locales.
De acuerdo con los testimonios recabados, los jóvenes fueron citados a acudir uniformados, con playera o pantalón negro, y se les prometió que regresarían en pocos días. Las invitaciones a estos “empleos” llegaban a través de amigos o conocidos, a veces en parejas, y entre los días 10 y 11 de agosto abandonaron sus hogares sin que hasta ahora se tenga noticia de ellos.
Cansados de la lentitud institucional, los familiares exigen la intervención del Gobierno del Estado y de la Marina, temiendo que se trate de un caso mayor similar a reclutamientos forzados documentados en otras regiones. Las denuncias ante la Fiscalía de Puebla no han mostrado avances significativos: no se han realizado cateos ni revisión de cámaras de seguridad, y las familias señalan irregularidades como el retiro de lonas informativas y la eliminación de publicaciones en redes sociales relacionadas con las desapariciones.
Entre los desaparecidos se encuentran jóvenes como César Eduardo, de 17 años; Misael Romero, de 29, identificado por sus tatuajes; y Alfredo de los Santos, de 30, con una cicatriz en la frente. Cada caso refleja la dimensión humana de la tragedia y recuerda que las desapariciones no son estadísticas, sino vidas arrancadas a sus familias.
Este suceso resalta la vulnerabilidad ante falsas ofertas de empleo en un contexto de escasez laboral y la urgencia de que las autoridades actúen con eficacia. La exigencia de justicia y verdad recae no solo en las familias, sino en toda la sociedad, que no puede normalizar la desaparición como parte del día a día.

