


Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- Mientras se registran cientos de casos de desnutrición en menores de 5 años, el DIF de Córdoba opera un comedor que no forma parte de ningún programa alimentario destinado a combatir la pobreza o la desnutrición.
Aunque el organismo cuenta con una Coordinación de Asistencia Alimentaria y programas como los desayunos escolares, la persistencia de estos casos evidencia el fracaso de sus estrategias, revelando una contradicción entre la existencia de estructuras especializadas y los nulos resultados en la erradicación del hambre.
Tal como un negocio cualquiera, el comedor del DIF funciona con costos para los usuarios, en un contexto donde organizaciones civiles, como el Banco de Alimentos de las Altas Montañas, advierten que la pobreza persiste precisamente por la falta de acceso a comida.
De acuerdo con la respuesta oficial proporcionada por Elizabeth Vela Rodríguez, encargada del comedor ubicado en calle 13 esquina con avenida 11, este espacio “no trata de un programa alimentario” y por lo tanto “no se le da ningún tipo de seguimiento” a quienes acuden. Se trata de un servicio abierto al público en general, sin filtros socioeconómicos. El desayuno cuesta 30 pesos y la comida 40. Hasta junio de 2025, se reportaron ingresos por 43 mil 635.67 pesos.
Este servicio con fines recaudatorios, dentro de una institución pública, contrasta con los datos de la Secretaría de Salud. Sólo en 2024 se registraron 282 casos de desnutrición infantil en la Jurisdicción Sanitaria de Córdoba, y en 2025 la cifra preliminar ya alcanzó los 256 casos.
Córdoba, Coscomatepec, Atoyac y Fortín concentran los números más altos, con casos desde leves hasta graves.
El Sistema Municipal para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Córdoba posee una estructura formal para atender la crisis alimentaria, supuestamente operada por nutriólogos.
Entre sus obligaciones está el diseño y aplicación de programas para combatir el hambre, como la entrega de desayunos escolares, fríos y calientes.
Sin embargo, la existencia de dicha coordinación y estos programas hace aún más evidente el incumplimiento de sus objetivos.

